miércoles, 12 de octubre de 2022

Condenan a 30 años de prisión al Panadero

El hombre confesó que mató y lanzó al mar a la niña Liz Mary en agosto de 2020.


El Primer Tribunal Colegiado de la provincia Santo Domingo, dictó este miércoles una condena de 30 años de prisión al imputado Esterlin Francisco Santos, mejor conocido como “El Panadero”, acusado de violar y asesinar a una niña de nueve años de edad en el 2020. Francisco Santos admitió que violó y estranguló a la niña Liz María en el Ensanche Isabelita, cuyo cadáver lanzó al Mar Caribe y aún no ha sido encontrado.


En el documento instrumentado por el Ministerio Público, dijo que conoció a la niña hacía tres meses y que dos semanas después empezó a sentirse atraído por la menor, quien se le sentaba en las piernas a jugar con su teléfono personal.


“Yo le prestaba mi teléfono celular para que ella viera muñequitos y jugara los juegos que yo le había descargado para ella, en ese momento me aprovechaba para manosearla y tocar sus partes íntimas. Cuando le tocaba sus partes ella se quedaba tranquila y yo continuaba manoseándola, en diversas ocasiones la Liz Mary visitaba mi casa para jugar con mi hijo”, relató el imputado ante los fiscales.


Contó que le ofreció su celular y que la invitó a su casa para entregárselo, luego le dijo que debía sacar algunas informaciones, pero empezó nuevamente a tocarle sus genitales, escena repetida, el mismo día del hecho.


Detalló que la niña lo amenazó con decirle a sus padres la acción que este estaba cometiendo en su contra, por lo que se puso nervioso y trato de impedirlo.


“Yo me puse nervioso y cuando Liz Mary se iba a marchar a su casa la agarré por el cuello y empecé a estrangulara. Ella trataba de defenderse, cuando ella dejó de moverse introduje el cuerpo en un saco vacío de harina de trigo color blanco, en la cabeza le puse una funda negra para que nadie la pudiera ver si se salía del saco, luego la coloqué en el canasto del motor”, confesó encartado.


Indicó que después que preparó el escenario dijo que tomó su motocicleta, que estaba estacionada en el callejón frente a su casa, se dirigió a la estación de combustible.


Agrego: que echó la suma de RD$$100.00 pesos de gasolina, al regresar, "como mi hijo aún estaba dormido, aproveché para montar el cuerpo de Liz Mary que estaba dentro del saco en un canasto color amarillo, que está en la parte trasera de mi motocicleta. Me dirigí hacia el Obelisco que está cerca de la Marina de Guerra para lanzar el cuerpo, pero al llegar había muchas personas allí, luego seguí para la autopista Las Américas y lancé el cuerpo".

1 comentario:

  1. Al fin se le hiso justicia a esa pequeña niña y a la madre también debieron de meterla presa por descuidada

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